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Diario de una viciosa

Lejano recuerdo

!Qué lejos queda aquel verano!

Veraneando... típico apartamento de playa de familia española. Una familia que decide salir y dos primos que prefieren quedarse.

Hora de la siesta, vemos la tele, 14 años yo y 15 él. Hormonas por las nubes. Ese fue mi primer encuentro sexual.

Antes de que pudiera reaccionar ya estabamos besandonos como locos, mi coño nunca habia generado tanto fluido hasta entonces...

él empezó a lamer suavemente mis pezones, más tarde los mordía de forma animal, yo jadeante, él a punto de derramarse en los pantalones. Entonces vino mi primer dedillo. Me hizo daño al principio, pero tras unos segundos ya le pedí el segundo.

Allí también practiqué mi primera mamada. Él ni corto ni perezoso me lleno la garganta con su leche... tan espesa. En unos segundos sentía como me retorcía por dentro mientras me corria con sus dos dedos introducidos hasta el fondo, en un ultimo momento recuerdo que dí gracias por aquello que me estaba sucediendo. Desde entonces hemos tenido muchos encuentros. Primo querido...

!Qué lejos queda aquel verano!

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